¿Cuánto cuesta el agua en España y Europa?

Pasado, presente y futuro:

“El agua es esencial para la vida humana, la naturaleza y la economía. El agua se renueva permanentemente, pero es un bien finito, que no puede obtenerse a partir de otros recursos o ser sustituido por otros recursos. El agua dulce constituye solo aproximadamente el 2% del agua del planeta y demandas competidoras pueden llevar a un déficit de la oferta de agua a nivel mundial que se estima en el 40% para 2030”.

Así empieza el Plan para salvaguardar los recursos hídricos de Europa, Bruselas, 14.11.2012.

A pesar de que el 70 % de la superficie de la Tierra es agua, solo el 2,5 % de esta es agua
dulce, el 97,5 % restante es salada. Estas cifras nos dan una idea de la importancia que tiene el consumo respetuoso del agua.

Figura 1. Distribución del agua en el mundo. Fuente Igor A. Shiklomanov, State Hydrological Institute and United Nations Educational, Scientific and Cultural Organization; UNESCO, París.

Cuando se analizan los consumos de agua en los diferentes países del mundo sorprende la disparidad de cifras.

Tabla 1. Datos de consumo en diferentes áreas geográficas de la Tierra.

Extraida del Grupo de Tratamiento de Aguas Residuales. Escuela Universitaria Politécnica. Universidad de Sevilla. (www.ambientum.com). Datos del 1996.

Estas cifras demuestran lo importante que debería de ser ahorrar agua no solo en las zonas con problemas de suministro, sino también en las que no los hay, ya que en las zonas más pobres del planeta hay una dificultad creciente para conseguir cubrir las necesidades mínimas de agua potable segura, incluso en areas que disponen de gran cantidad de agua, como en América Latina, y que gran parte de la población no dispone de acceso a la misma.

Este consumo medio residencial del agua en España, cifrado en unos 329 l/per.-día, a su vez, se desglosa con las siguientes proporciones:

• un 10 % para agua de boca, es decir, unos 32,9 l/per.-día que necesitan una calidad extrema;
• el 60 % (197,4 l/per.-día) que acaba convirtiéndose en aguas grises, no necesita de la calidad anterior, contiene bajos niveles de contaminantes y no contiene productos orgánicos siendo fácil su depuración y reutilización;
• finalmente, el 30 % restante (98,7 l/per.-día), que se convierte en aguas negras, se caracterizan por un alto grado de contaminantes bacterianos, es patológica para el ser humano y de difícil depuración.

Es decir, que el 90 % del agua que se consume no necesita tener la calidad extrema  que, actualmente tiene, y, por lo tanto, se podrían utilizar aguas reaprovechadas de otras fuentes que no fueran el agua de red suministrada (depurada y transportada) con el consiguiente consumo de energía asociado a ella.

Según el Instituto Nacional de Estadística (NIE) en la Encuesta sobre el Suministro y Saneamiento del Agua del 2020, el coste unitario del agua se situó en España en 1,90 €/m³ de media, correspondiendo a 0,83 €/m³ de coste en el saneamiento y 1,06 €/m³  del coste de suministro (fuente: www.iagua.es).

Este precio es engañoso, pues es el precio de los servicios a los que tiene acceso AEAS-AGA. Y es una media nacional. Hay ciudades que tienen precios por encima de los 2 €/m³ y otros municipios que no llegan a 0,25 €/m³ y, algunos, no cobran por este servicio.

Previsiones

Las previsiones de los organismos oficiales son que el precio del agua se elevará durante los próximos años hasta equipararse al precio del agua en otros países europeos, como Dinamarca, que se sitúa en los 9,23 €/m³ (ver “fig. 2”).

Figura 2. Precio medio doméstico del agua en Europa. Fuente EurEau 2020.

Como se puede observar, España se sitúa el 7º país por la cola en el precio del agua, por debajo del coste real que supone el agua y con el consiguiente déficit que se crea. El precio de coste del agua en España se estima que es de 3 €/m³.

Tabla 2. Datos de consumo de los diferentes usos en la vivienda, según estadísticas de la compañía de agua Aigües de Barcelona.

Conclusión

En conclusión, vistos los precios de la factura del agua en España y Europa, se prevé un aumento del coste debido a la necesidad de invertir en la red de suministro de agua dada su antigüedad y las escasas inversiones  causadas por el déficit entre coste y precio final. Por lo tanto, el precio del metro cúbico se elevará en los próximos años (ya lo ha hecho en los últimos 10 años en un 18 %) según organismos oficiales, hasta alcanzar a otros países europeos como Dinamarca.

Por lo tanto, lo que propongo es que tengamos una conciencia mayor de la importancia del ahorro de agua, para conseguir dos cosas:

• reducir la factura mensual y
• conseguir que el agua, cada vez más escasa, llegue a la mayor parte de zonas con escasez.